Streaming: ¿Hacia un nuevo modelo de contenidos y comunicación?

En los últimos años hemos observado un cambio de paradigma en la comunicación audiovisual impulsado por modelos de negocio vinculados al streaming. Del mismo modo que Netflix redefinió el consumo de series y películas ahora llega una nueva metamorfosis liderada por Twitch, aunque esta plataforma es solo la punta de lanza de una nueva demanda del consumidor dirigida a explorar nuevos formatos de consumo audiovisual en búsqueda de nuevas experiencias.

2020, el año clave en el consumo de contenidos

La consolidación del streaming tiene una fecha clara: 2020. Los hábitos adquiridos por el consumidor durante la crisis del Covid-19 han impulsado y reformulado definitivamente el modelo de la industria audiovisual pasando de una realidad de consumo en familia frente a la televisión a un consumo en solitario y a la carta desde nuestro móvil, tablet u ordenador.

Los patrones creados por la pandemia plantean retos a todos los niveles para las marcas, especialmente en el terreno publicitario o incluso en la planificación de campañas de la propia industria. Un ejemplo es el modelo tradicional de ventanas de distribución donde el producto audiovisual acostumbraba a atravesar diferentes pantallas para maximizar su impacto en la audiencia: primero estreno en cines, posteriormente en DVD, luego en alquiler, más tarde en TV, etc.

Tradicionalmente se ejecutaba este sistema para impedir que un mismo producto no compitiera contra sí mismo en otros canales y asegurar así una parte del pastel para todos los agentes de la cadena, pero este modelo cada vez tiene menos sentido para un consumidor educado a consumir un producto cuándo quiere, cómo quiere y dónde quiere.

Twitch, la “nueva televisión” que engancha a los más jóvenes

En ese modelo de consumo a la carta se ha erigido con fuerza este último año un nuevo fenómeno que basa su fuerza en el directo y la interacción. Hablamos de plataformas como Twitch o UBEAT que nacieron originalmente para la retransmisión de partidas de videojuegos, pero cada vez más se han abierto un hueco en el mercado audiovisual informativo y de entretenimiento.

El caso de Twitch es sin duda uno de los fenómenos culturales y sociales más relevantes del último año. La plataforma, propiedad de Amazon, ha evolucionado logrando en un año un incremento del 83% en tiempo de visionado manteniendo las horas de visualización por encima de los 1.500 millones.

A través de figuras como Ibai Llanos, TheGrefg o AuronPlay, Twitch ha conquistado a la Generación Z y prueba de ello es el récord alcanzado por TheGrefg con 2,4M de espectadores simultáneos en la presentación de su skin de Fortnite o eventos como “Las Campanadas con Ibai”, entre las tres retransmisiones con más espectadores en la historia de Twitch a nivel global. Ejemplos claros de que existe un nuevo escenario comunicativo frente a los medios tradicionales.

Un lenguaje natural y atrevido como secreto del éxito

Uno de los principales secretos del éxito de estos streamers es su gran capacidad comunicativa para mantener la atención de los espectadores. Nos encontramos sin duda ante una nueva forma de comunicar más directa y cercana con un lenguaje abierto, natural y desenfadado que poco tiene que ver con los estrictos códigos de medios tradicionales como la televisión.

Y en ese contexto la información ha encontrado un hueco en este formato más allá de los videojuegos. Actualmente en Twitch podemos encontrar contenidos de salud, cocina, bienestar, arte, viajes, turismo, o incluso política, como el seguimiento realizado por Emilio Doménech, Nanisimo, en las elecciones presidenciales en Estados Unidos donde se dedicó durante horas a analizar la campaña electoral o los resultados del escrutinio.

Por tanto, cada vez más rostros alejados del universo gaming apuestan por conectar con sus seguidores de una forma más directa, pero ¿significa eso una amenaza para los medios tradicionales tal y como los conocemos?

Una nueva forma de comunicación, ¿y periodismo?

Lo cierto es que el potencial de Twitch como canal de información, ocio y entretenimiento es tremendo. Las generaciones más jóvenes priorizan la intensidad de los eSports a la retransmisión, a veces carente de ritmo, de deportes tradicionales en la gran pantalla. Los usuarios cada vez optan por figuras como AuronPlay, El Rubius o Ibai Llanos antes que por rostros consolidados en la televisión española y eso también tiene un efecto directo sobre los entrevistados.

Los streamers se lanzan a conquistar cada vez a un público más generalista de otros rangos de edad que buscan disfrutar de sus contenidos de una forma diferente y para ello invitan a sus canales a personajes conocidos de otros ámbitos como cantantes, artistas o deportistas.

Recientemente hemos visto al popular Ibai Llanos entrevistar a Gerard Piqué, Marc Gasol, C Tangana o Sergio Ramos, entre otros. Personajes a los que periodistas tienen mucho más difícil acceso por el perfil de contenido que trabajan desde sus respectivos medios y que no cuentan con la libertad y espontaneidad de Twitch.

Las reglas en Twitch son diferentes y eso lo saben no solo entrevistadores y entrevistados, sino grandes marcas como Doritos, ColaCao, Movistar o Domino’s Pizza que han apostado ya por Ibai para llegar a audiencias más globales en un contexto comunicativo mucho más fresco, natural y estimulante para el usuario.

Estamos sin duda ante un nuevo terreno a explorar para todos. El streaming ha dejado de ser un territorio exclusivo para gamers para adentrarse en todo tipo de eventos como festivales de música, presentaciones, concursos, entrevistas… A buen seguro la involucración de las marcas no solo se limitará al patrocinio de espacios, sino cada vez más a la creación de contenido propio para su comunidad. La clave para que la apuesta funcione será como siempre que esa creación sea realmente por contenido de calidad y atractivo para la audiencia.