¿Es posible comprender una información en 140 caracteres?

La instantaneidad se ha convertido en el mejor aliado de la comunicación.

Escrito por: Beatriz Dorado

La instantaneidad se ha convertido en el mejor aliado de la comunicación. El aquí y ahora que tantas y tantas veces nuestros padres han intentado quitarnos de la boca cuando queríamos algo, se ha instaurado en los medios digitales y en su manera de narrar las noticias.

Poco a poco las largas crónicas de sucesos, viejas amigas del periodismo clásico, están siendo sustituidas por nuevos géneros periodísticos que relatan el hecho noticioso en el mismo instante en que se produce. Es lo que expertos en la materia como Manuel de Ramón, profesor de Periodismo Especializado de la UCM, han denominado “crónica de titulares”.

Se trata de un nuevo género que está revolucionando los medios online y supone la máxima expresión del periodismo fragmentado. Titulares descriptivos de dos o tres líneas que informan en tiempo real de lo que está ocurriendo mediante mensajes cortos, similares a los de la red del pájaro azul, pero sin el corsé de los 140 caracteres. Titulares que a pesar de surgir de manera aislada y carecer de hilo narrativo, permiten a los periódicos digitales informar en tiempo real de lo que acontece, dando la sensación de instantaneidad propia de los medios audiovisuales, sin perder su seña de identidad: la escritura.

ElPaís.com ya lo empleó para comunicar por primera vez en la historia la elección de un Papa a través de este nuevo género. A finales de febrero, ElMundo.es también se acogía a la “crónica de titulares” para informar en tiempo real del juicio de Iñaki Urdangarín por el caso Nóos; y hace apenas unos días los medios lo han vuelto a usar para relatar la elección del nuevo secretario general del PSOE.

Esta es la nueva fórmula que están ensayando los periódicos online para adaptarse al continuum informativo y comunicar sucesos relevantes que se extienden durante horas. A pesar de los muchos acontecimientos que expertos en medios digitales como Carmela Ríos han transmitido vía Twitter, cabe preguntarse si este nuevo periodismo fragmentado, ahora empleado por los propios medios digitales en sus portadas (no en redes sociales), da lugar a noticias inconexas difícilmente comprensibles para el receptor. No hay que perder de vista que en él intervienen varios redactores y que, aunque la instantaneidad es relevante, los ejemplos aquí mencionados todavía resultan escasos.

Por ello, es pronto para sacar conclusiones sobre las posibilidades de que un lector recree esa crónica en su cerebro y obtenga un conocimiento aproximado de la realidad global. No olvidemos que como afirma el director del Center for Internet Studies and Digital Life en la Universidad de Navarra, Ramón Salaverría, “el periodismo es un oficio que, más que mano de obra, necesita cabeza”, y quizá por ello, un periodista que tras la retransmisión, siga realizando una crónica global.